DESCUBRE LA EXPLICACIÓN CIENTÍFICA DE LA FELICIDAD

Todo el mundo va por la vida buscando la felicidad. Parece una buena filosofía para vivir la vida, pero cabe preguntarse qué es lo que estamos persiguiendo. La felicidad es uno de esos conceptos difíciles de explicar, tan difícil que hay muchas personas que dicen tener la respuesta. Es además de ese tipo de conceptos cuyo significado puede cambiar dependiendo la época o el lugar en el que nos encontremos. La filosofía dice tener respuestas, la religión también e incluso cada uno de nosotros tiene una cierta idea de a qué nos referimos.

Cuando uno se pone a pensar al respecto espera pocas consecuencias más allá del estallido de su cabeza, así que para evitar esto quizás una buena forma de empezar sea revisar qué es lo que dice la objetiva ciencia al respecto. En el Diario de Cloe te explicamos en palabras sencillas de qué va la felicidad desde la perspectiva científica.

En términos científicos, sentimiento que llamamos felicidad está relacionado, como mucho de lo que pasa en nuestras mentes, a una alta presencia de ciertos químicos en nuestro cerebro denominados neurotransmisores, particularmente de cuatro: dopamina, serotonina, oxitocina y endorfinas.

La dopamina está asociada principalmente a nuestra sensación de logro. Para estimular el flujo de dopamina naturalmente necesitamos estar en un contexto que imponga aunque sea pequeños retos, es por lo que se vuelve tan esencial en nuestra vida el planteamiento de objetivos y proyectos tanto en la vida profesional como en la personal.

La serotonina, en la opinión de muchos expertos, es en sí misma la hormona de la felicidad. Este neurotransmisor controla nuestro estado de ánimo y ansiedad. De hecho, la depresión está directamente ligada a los bajos niveles de serotonina en el cerebro.

La oxitocina, si tuviéramos que etiquetarla, es el neurotransmisor de los contactos y conexiones interpersonales, de hecho muchos la consideran como la “hormona del amor”. La descarga de oxitocina genera una sensación placentera cuando se está vinculado por un en una relación constructiva.

Las endorfinas son neurotransmisores cuyo efecto consiste básicamente en encubrir el dolor con sensaciones placenteras. Su descarga genera una sensación de euforia.

Ya sabiendo esto podemos deducir varias formas de mantenernos felices. El deporte, por ejemplo, es una forma magnífica de cultivar nuestra felicidad dado que la actividad física está asociada directamente al incremento en los niveles de serotonina, dopamina y endorfinas. Hay técnicas de masaje tan sofisticadas que son capaces de liberar un alto flujo de oxitocinas. Inclusive el chocolate produce una importante alza en los niveles de oxitocina. Existen muchas otras formas naturales de sentirte plena y feliz, y con estos conocimientos ya estás en condiciones de buscarlas por tu cuenta, ¡Explora nuevas maneras de esparcir estos neurotransmisores por tu cerebro!